martes, 13 de mayo de 2014

¿Y la mujer dentro del periodismo español?

En una de estas "amabilidades" que la facultad nos requiere... chanchanchan chan:

Julio Somoano, director de los Servicios Informativos de TVE, y Cristina Sánchez, corresponsal de guerra para el programa "Países en conflicto" de Radio5, nos contestan a una misma pregunta con unas palabras que escupen por sí solas.

De él lo único que nos quedó claro es que está 100%algodón seguro de que no es una mujer.

Pincha y llora con nosotras los primeros 45 segundos del vídeo.



lunes, 12 de mayo de 2014

Femenina y feminista

Si buscas en Google “Feminista” y “Femenina” ambos términos aparecen como antagonistas en la mayoría de las entradas. He vivido toda la vida con la imposición social de tener que elegir entre una cosa u otra. Como mujer heteronormativa y feminista me he visto en la tesitura de tener que defender mi aspecto frente a mi modo de pensar en numerosas ocasiones. Unos grupos y otros me critican simplemente porque no encajo en lo que se espera de ninguna de las dos cosas. Pero yo soy mujer, soy hetero, soy femenina y feminista.

Por una esquina digna

Me llamo Victoria Arias, pero puedes llamarme La Putónoma. Podría tener nombres mucho más sugerentes, como Cherry Boom Boom, Carla Deluxe...o Queen Escarlata si nos ponemos literarios. Pero soy pragmática y estoy harta de la hipocresía que tiñe de invisible mi profesión.
Soy autónoma, de profesión puta. Profesional del sexo. Prostituta. Trabajadora sexual.
No víctima. No explotada. No criminal.
Ahí no me jodas.

Machirulosexualidad como nueva orientación

La sociedad no sólo decide que por ser maricón eres menos hombre, sino que además también decide que los gays tienen que responder al típico tópico de la pluma. ¿Desde cuando las corridas de todos y un buen coñac son incompatibles con las noches en chueca? Me llamo Gayetano Rivera Ordóñez y creo que las mujeres deberían vivir en la cocina, eso sí, en mi cama prefiero la carne.

La visibildad invisible de las lesbianas

Estoy muy harta de que se me encasille en ser una marimacho (¿qué tendrán en contra de las camisas de cuadros?), de que se diga que actúo como un hombre (todos somos humanos y todos nos tiramos eructos). Estoy harta de que diga que soy una lesbiana marimacho cuando simplemente soy una lesbiana. Mi nombre es Panriqueta Scissors y busco cortar los estereotipos que encasillan a las lesbianas igual que los patrones de la ropa que coso.

Bienvenidx al género independiente de mi casa

Ya no recuerdo la primera vez que, al grito de “¡Maricón de mierda!”, me empujaron y caí al suelo. Tampoco recuerdo la primera vez que entendí que intentar huir de esa palabra no era la solución. Maricón es despectivo, sí, por ellxs, por los que creen que sexualidad y género van en el mismo paquete. Mi argumento no era decir “No me gustan los hombres”, no querían escucharme, eso era un dato menor. Sabían perfectamente que me había liado con chicas, era esa nueva forma de masculinidad la que no entendían y castigaban. Mi nombre es Adana, a veces, Evo, y reivindico la palabra maricón, aunque no sea gay.

La manufactura de la identidad de género en los estados terapéuticos

Transportadme a realidades que están por venir, donde el único tránsito que se juzgue sea el intestinal, eso sí, solo si se transforma en ventosidades que barnicen vuestras narices. Mi nombre es Entreleg mix y hace tiempo que mi sexo y mi género no se llevan bien, aunque los dos coinciden en una cosa: su amor incondicional a las papayas. Transmuten su delantera y reivindiquen su trasera como la única ojetalmente universal.